CARZOLIO, María Inés y BARRIERA, Darío G. (Comps.) Política, Cultura, Religión. Del Antiguo Régimen a la formación de los Estados Nacionales. Homenaje a Reyna Pastor, Prohistoria, Rosario, 2005, 242 pp.
Bajo el título Política, Cultura, Religión... se nos presenta una compilación de trabajos que se unen con el propósito de rendir homenaje a la Dr. Reyna Pastor, obras inspiradas en líneas de investigación que dicha historiadora ayudó a desarrollar. Este libro fue construido a partir de algunas ponencias presentadas en las III Jornadas de Historia Moderna y Contemporánea realizadas en Rosario, a las que se les sumaron contribuciones externas, jornadas en las que se confirió a Reyna Pastor el doctorado Honoris Causa.
En “Las biografías medievales, problemas teóricos e historiográficos. Especialmente referidos a las de las mujeres castellanas”, Reyna Pastor vuelve su mirada sobre las biografías, consideradas como material de análisis que permite ampliar los estudios sobre actores sociales que aparecieron excluidos de roles que implicaran toma de decisión en la sociedad medieval y temprano moderna, como fue el caso de las mujeres. El rescate de las biografías de mujeres medievales no sirve sólo para profundizar sobre un agente en particular, sino que enriquece al mismo tiempo los estudios sobre la historia de las mujeres. A partir de las biografías es posible arrojar nuevas luces sobre diferentes problemáticas, así como ampliar el conocimiento sobre otros actores sociales muchas veces dejados de lado.
En“Imágenes, mujeres y justicia. Pleitos civiles entre dos mundos, siglo XVII”, de Silvia Mallo y Cecilia Lagunas, aparece nuevamente la mujer como un actor social central, en este caso de un pleito por el reparto de la herencia de un comerciante español. A partir del estudio de un pleito originado en la Real Audiencia de Panamá, en el cual la viuda intenta, a la muerte del esposo, tomar el control del patrimonio y de las redes familiares ocasionado un enfrentamiento con el resto de los miembros de la familia, las autoras se adentran en el análisis de las formas en que interactúan las redes de parentesco en la América colonial, donde la organización familiar se estructura en torno al hombre, cabeza de familia, como medio de preservación del patrimonio. Esta investigación busca destacar la cuestión del género como elemento a considerar en el terreno de la disputa.
En los trabajos de Elisa Caselli, Bernard Vincent y Carlos Calderón adquiere centralidad la cuestión de la religión y los vínculos que ésta mantiene con la política, aunque los objetivos que estos autores persiguen y las formas de abordaje de esta problemática disten de ser iguales. Bernard Vincent en “L’Islam en Espagne a l’époque moderne” se propone rebatir la idea, sostenida con fuerza por la historiografía tradicional, de que España consiguió su unidad religiosa durante la Edad Moderna, constituyendo una Monarquía donde judíos y musulmanes habían emprendido el camino del bautismo o del exilio. La visión que presenta a la España moderna sólo integrada por cristianos viejos y nuevos es puesta en cuestión por B. Vincent, quien demuestra que los judíos y, sobre todo, los musulmanes, continuaron presentes en los territorios de las Coronas de Castilla y Aragón, a pesar de las órdenes de expulsión.
Elisa Caselli, en“El antijudaísmo cristiano en las relaciones políticas (Castilla, siglo XV)” nos ofrece una mirada, a través del concepto de antijudaísmo cristiano, sobre las relaciones existentes entre la comunidad judía y la cristiana, que además de sostener convicciones religiosas excluyentes, imponían una exclusión que iba más allá de la religión. Mediante el concepto de antijudaísmo, Caselli, intenta dar cuenta de cómo un sentimiento religioso podía operar en las relaciones de poder, ya que con la constitución de la Monarquía castellana sacralizada cuyo fundamento era religioso, éste fue utilizado para fortalecer las relaciones de poder al interior de la Monarquía cristiana. Esta autora plantea la inherencia de poder, política y religión, inseparables en las instancias de decisión política, en las sociedades de Antiguo Régimen, siendo la administración de justicia y la producción de derecho niveles resultantes de esas relaciones.
Por su parte, en “Los guardianes de la penitencia y el delito de Solicitatio ad turpia en los registros inquisitoriales de Galicia a fines del Antiguo Régimen (1700-1820)”, Carlos Calderón, partiendo de los registros inquisitoriales, material mediante el cual puede analizarse la actuación del Tribunal de Galicia, centra su análisis en un delito dejado de lado por otras investigaciones: el de la solicitatio ad turpia, que era la solicitación por parte del confesor a sus confesadas en el mismo acto de la confesión de “palabras blandas o amorosas”. Este delito, considerado como una forma de corrupción sexual instigada por eclesiásticos a sus hijas de confesión, permite a Calderón adentrarse en el contexto social y cultural del Antiguo Régimen, en el cual estos hombres de iglesia se encontraban inmersos, donde delito y pecado se mezclaban. Dicho autor muestra cómo el Tribunal de Inquisición que accionaba sobre este delito, cometido por clérigos, apuntaba así al corazón de la misma institución eclesiástica.
Los artículos de J. J. Ruiz Ibáñez, M. Moriconi, M. Bonaudo y M. I. Carzolio constituyen estudios que, desde un enfoque político, buscan centrarse en las interacciones de los actores colectivos y en las relaciones de poder que se estructuraban a partir de los vínculos que éstos iban tejiendo entre sí.
Así en su trabajo, “Procesos políticos, discurso e interés social en Europa a fines del siglo XVI”, José Javier Ruiz Ibáñez, teniendo como premisa que en las sociedades de Antiguo Régimen los agentes tuvieron posiciones activas frente al sistema político, se propone una reflexión sobre las tomas de posición de los actores. Podemos considerar como pregunta central del texto la cuestión acerca de qué llevó a un individuo a adscribirse a una determinada propuesta política, ya que a si bien la Monarquía desplegó un sinnúmero de mecanismos de coacción, la elección de los agentes no estaba predeterminada. Para este autor, sobre la elección que realizaron los agentes hay dos cuestiones a considerar: la vida cotidiana en la ciudad, que fue generando espacios ideológicos que influyeron sobre el individuo, y la propia experiencia personal de estos actores sociales.
En la misma dirección se encuentra el texto de Miriam Moriconi “Comportamiento político de los actores sociales en el concejo de la villa de Potes. Siglos XVI- XVII”, cuyo análisis se centra en el estudio de los conflictos entre un señor monástico y los campesinos de una comarca cantábrica (Potes). Las relaciones mantenidas por el Monasterio de Santo Toribio de Liébana con los concejos fueron tensas, debido a que éste avanzó sobre los usos y costumbres de los vecinos. Sin embargo, los concejos se defendieron tenazmente, llegando incluso, como en el caso del concejo de Potes, a reclamar ante la justicia real. Considerando que el ejercicio de la justicia local constituyó un rasgo fundamental de las formas de hacer política, la propuesta gira en torno a la reflexión acerca del comportamiento político del grupo que acciona en nombre del concejo.
Esta relación entre justicia y ejercicio de la política subyace también en la investigación de Marta Bonaudo, “Hecho jurídico...hecho político. La conflictiva relación entre poder y justicia en la construcción de la República posible. Santa Fe 1856- 1890”. La autora propone analizar la relación conflictiva entre justicia y poder que se fue suscitando en el marco de una sociedad, como la santafesina, que ha emprendido el tránsito hacia un orden social burgués, tomando como premisa que el campo de la justicia no escapa a las lógicas del poder y dejando al descubierto la compleja gama de vínculos entre los miembros de los espacios jurídicos y las redes de poder. Esta autora nos muestra cómo la consolidación del campo jurídico provoca adaptaciones y resistencias que obligaron a replantear los usos que las clases dominantes hicieron de la justicia.
El trabajo de María Inés Carzolio, “Acerca de algunas solicitudes de naturaleza atípicas que figuran en los Libros de Acuerdos de Cortes durante el reinado de Felipe IV”, indaga sobre el aumento de las concesiones de naturaleza durante el siglo XVII. Considerando que la obtención de una carta de naturaleza fue un requisito fundamental para alcanzar ciertos beneficios y privilegios, estas fueron solicitadas a Rey con frecuencia. La concesión de estas cartas era un regalía del Rey, quien poseía la facultad de crear naturaleza; para los solicitantes y la Corte era una merced otorgada como retribución por algún servicio. Carzolio plantea que, si bien, estas cartas nunca fueron ofrecidas a la venta, en ciertas ocasiones tuvieron un trámite extraño, sobre todo en momentos cuando las necesidades económicas contribuyeron a que aumentase su otorgamiento. Para la Corona, este mecanismo constituyó una fuente de ingreso y una posibilidad de establecer vínculos y relaciones con determinados grupos.
El artículo de Fernanda Mazzanti Pepe, “I caratteri originaldi del federalismo liberali e democratico. Dai Girondini a Cattaneo”, plantea un esclarecimiento del proyecto federal de Carlo Cattaneo (1801-1869), ambiguamente invocada por un reciente gobernante italiano. Como anota, el mismo concepto y la misma palabra pueden ser declinados de modo variable, para adquirir significados diversos y remitir a universos conceptuales, proyectos políticos y elecciones constitucionales muy distintos. Cattaneo se inspiró en el federalismo de Brissot. Para el jurista italiano, el federalismo estaba unido a un concepto de libertad y autonomía locales destinado a contrabalancear el superpoder del centro, promovido por Cavour. Para Cattaneo solo una sociedad civil articulada y pluralista podía ser portadora de la libertad nacida del equilibrio entre los derechos individuales y los de la comunidad, y de la democracia entendida como posibilidad concreta del ejercicio de los derechos civiles y políticos.
Ana Carolina Hosne en “Mundo, hombres y vida política bajo la influencia de Saturno. Una aproximación a la relación entre política y melancolía en la Europa Moderna” nos brinda una visión sobre los vínculos establecidos entre la política y la melancolía desde la perspectiva de los teóricos políticos del siglo XVI. Esta autora plantea como la melancolía, a partir de los aportes de la teoría humoral, fue tomada en consideración por diferentes autores durante ese siglo, pero siempre cargada de negatividad, y los hombres “melancólicos”, considerados una amenaza al buen gobierno. Su trabajo muestra cómo desde la política, muchos problemas fueron tratados y reformulados haciendo uso de la teoría humoral.
Igualmente el trabajo de María Luz González “Prudentes como las culebras y simples como las palomas. Algunas sugerencias para el buen gobierno de una monarquía”, nos propone una reflexión política sobre el siglo XVIII a través de los espejos de príncipe. Tomando como base la fuente “El Arte de Reinar” de Vicente Bacallar y Sanna donde el autor dirige consejos a Luis I para su buen gobierno. Este trabajo busca dar cuenta, por un lado, de la concepción política del autor de “El arte...”, y, por otro lado, su intento de congraciarse con el nuevo monarca.
Tanto la investigación de Hosne como la de González, así como la de Burucúa, “La variedad de lenguas, culturas y multitudes como instrumento paradojal de la unidad humana en los conflictos religiosos del siglo XVI”, están estructurados en torno a algunas obras que sirven de base a sus respectivos trabajos. José Emilio Burucúa toma como eje en su análisis dos obras que ofrecen una visión muy significativa de los fenómenos de inclusión/ exclusión social: la Biblia de Ferrara, publicada en esa ciudad italiana en 1553, pensada como una pieza clave del programa de rehabilitación del judaísmo por parte de los marranos españoles en Italia, y la Peshitta, publicada en París en 1584 por Guy Le Fèvre de la Boderie, una traducción que acerca a los lectores familiarizados con lengua aramea y hebrea, y realizada como parte de un programa de inclusión del pueblo judío. Su propuesta gira en torno a pensar sobre cómo los libros, especialmente a partir de la imprenta, si bien no produjeron revoluciones, influyeron en decisiones políticas, económicas y sociales.
Política, Cultura, Religión… es un libro donde convergen una serie de investigaciones que, con diferentes formas de abordaje, sobre espacios distantes que van desde Europa hasta América, y con una amplitud temporal que se extiende desde la Edad Media hasta la formación de los Estados Nacionales, constituyen una invitación a reflexionar sobre diferentes problemáticas.
Bajo el título Política, Cultura, Religión... se nos presenta una compilación de trabajos que se unen con el propósito de rendir homenaje a la Dr. Reyna Pastor, obras inspiradas en líneas de investigación que dicha historiadora ayudó a desarrollar. Este libro fue construido a partir de algunas ponencias presentadas en las III Jornadas de Historia Moderna y Contemporánea realizadas en Rosario, a las que se les sumaron contribuciones externas, jornadas en las que se confirió a Reyna Pastor el doctorado Honoris Causa.
En “Las biografías medievales, problemas teóricos e historiográficos. Especialmente referidos a las de las mujeres castellanas”, Reyna Pastor vuelve su mirada sobre las biografías, consideradas como material de análisis que permite ampliar los estudios sobre actores sociales que aparecieron excluidos de roles que implicaran toma de decisión en la sociedad medieval y temprano moderna, como fue el caso de las mujeres. El rescate de las biografías de mujeres medievales no sirve sólo para profundizar sobre un agente en particular, sino que enriquece al mismo tiempo los estudios sobre la historia de las mujeres. A partir de las biografías es posible arrojar nuevas luces sobre diferentes problemáticas, así como ampliar el conocimiento sobre otros actores sociales muchas veces dejados de lado.
En“Imágenes, mujeres y justicia. Pleitos civiles entre dos mundos, siglo XVII”, de Silvia Mallo y Cecilia Lagunas, aparece nuevamente la mujer como un actor social central, en este caso de un pleito por el reparto de la herencia de un comerciante español. A partir del estudio de un pleito originado en la Real Audiencia de Panamá, en el cual la viuda intenta, a la muerte del esposo, tomar el control del patrimonio y de las redes familiares ocasionado un enfrentamiento con el resto de los miembros de la familia, las autoras se adentran en el análisis de las formas en que interactúan las redes de parentesco en la América colonial, donde la organización familiar se estructura en torno al hombre, cabeza de familia, como medio de preservación del patrimonio. Esta investigación busca destacar la cuestión del género como elemento a considerar en el terreno de la disputa.
En los trabajos de Elisa Caselli, Bernard Vincent y Carlos Calderón adquiere centralidad la cuestión de la religión y los vínculos que ésta mantiene con la política, aunque los objetivos que estos autores persiguen y las formas de abordaje de esta problemática disten de ser iguales. Bernard Vincent en “L’Islam en Espagne a l’époque moderne” se propone rebatir la idea, sostenida con fuerza por la historiografía tradicional, de que España consiguió su unidad religiosa durante la Edad Moderna, constituyendo una Monarquía donde judíos y musulmanes habían emprendido el camino del bautismo o del exilio. La visión que presenta a la España moderna sólo integrada por cristianos viejos y nuevos es puesta en cuestión por B. Vincent, quien demuestra que los judíos y, sobre todo, los musulmanes, continuaron presentes en los territorios de las Coronas de Castilla y Aragón, a pesar de las órdenes de expulsión.
Elisa Caselli, en“El antijudaísmo cristiano en las relaciones políticas (Castilla, siglo XV)” nos ofrece una mirada, a través del concepto de antijudaísmo cristiano, sobre las relaciones existentes entre la comunidad judía y la cristiana, que además de sostener convicciones religiosas excluyentes, imponían una exclusión que iba más allá de la religión. Mediante el concepto de antijudaísmo, Caselli, intenta dar cuenta de cómo un sentimiento religioso podía operar en las relaciones de poder, ya que con la constitución de la Monarquía castellana sacralizada cuyo fundamento era religioso, éste fue utilizado para fortalecer las relaciones de poder al interior de la Monarquía cristiana. Esta autora plantea la inherencia de poder, política y religión, inseparables en las instancias de decisión política, en las sociedades de Antiguo Régimen, siendo la administración de justicia y la producción de derecho niveles resultantes de esas relaciones.
Por su parte, en “Los guardianes de la penitencia y el delito de Solicitatio ad turpia en los registros inquisitoriales de Galicia a fines del Antiguo Régimen (1700-1820)”, Carlos Calderón, partiendo de los registros inquisitoriales, material mediante el cual puede analizarse la actuación del Tribunal de Galicia, centra su análisis en un delito dejado de lado por otras investigaciones: el de la solicitatio ad turpia, que era la solicitación por parte del confesor a sus confesadas en el mismo acto de la confesión de “palabras blandas o amorosas”. Este delito, considerado como una forma de corrupción sexual instigada por eclesiásticos a sus hijas de confesión, permite a Calderón adentrarse en el contexto social y cultural del Antiguo Régimen, en el cual estos hombres de iglesia se encontraban inmersos, donde delito y pecado se mezclaban. Dicho autor muestra cómo el Tribunal de Inquisición que accionaba sobre este delito, cometido por clérigos, apuntaba así al corazón de la misma institución eclesiástica.
Los artículos de J. J. Ruiz Ibáñez, M. Moriconi, M. Bonaudo y M. I. Carzolio constituyen estudios que, desde un enfoque político, buscan centrarse en las interacciones de los actores colectivos y en las relaciones de poder que se estructuraban a partir de los vínculos que éstos iban tejiendo entre sí.
Así en su trabajo, “Procesos políticos, discurso e interés social en Europa a fines del siglo XVI”, José Javier Ruiz Ibáñez, teniendo como premisa que en las sociedades de Antiguo Régimen los agentes tuvieron posiciones activas frente al sistema político, se propone una reflexión sobre las tomas de posición de los actores. Podemos considerar como pregunta central del texto la cuestión acerca de qué llevó a un individuo a adscribirse a una determinada propuesta política, ya que a si bien la Monarquía desplegó un sinnúmero de mecanismos de coacción, la elección de los agentes no estaba predeterminada. Para este autor, sobre la elección que realizaron los agentes hay dos cuestiones a considerar: la vida cotidiana en la ciudad, que fue generando espacios ideológicos que influyeron sobre el individuo, y la propia experiencia personal de estos actores sociales.
En la misma dirección se encuentra el texto de Miriam Moriconi “Comportamiento político de los actores sociales en el concejo de la villa de Potes. Siglos XVI- XVII”, cuyo análisis se centra en el estudio de los conflictos entre un señor monástico y los campesinos de una comarca cantábrica (Potes). Las relaciones mantenidas por el Monasterio de Santo Toribio de Liébana con los concejos fueron tensas, debido a que éste avanzó sobre los usos y costumbres de los vecinos. Sin embargo, los concejos se defendieron tenazmente, llegando incluso, como en el caso del concejo de Potes, a reclamar ante la justicia real. Considerando que el ejercicio de la justicia local constituyó un rasgo fundamental de las formas de hacer política, la propuesta gira en torno a la reflexión acerca del comportamiento político del grupo que acciona en nombre del concejo.
Esta relación entre justicia y ejercicio de la política subyace también en la investigación de Marta Bonaudo, “Hecho jurídico...hecho político. La conflictiva relación entre poder y justicia en la construcción de la República posible. Santa Fe 1856- 1890”. La autora propone analizar la relación conflictiva entre justicia y poder que se fue suscitando en el marco de una sociedad, como la santafesina, que ha emprendido el tránsito hacia un orden social burgués, tomando como premisa que el campo de la justicia no escapa a las lógicas del poder y dejando al descubierto la compleja gama de vínculos entre los miembros de los espacios jurídicos y las redes de poder. Esta autora nos muestra cómo la consolidación del campo jurídico provoca adaptaciones y resistencias que obligaron a replantear los usos que las clases dominantes hicieron de la justicia.
El trabajo de María Inés Carzolio, “Acerca de algunas solicitudes de naturaleza atípicas que figuran en los Libros de Acuerdos de Cortes durante el reinado de Felipe IV”, indaga sobre el aumento de las concesiones de naturaleza durante el siglo XVII. Considerando que la obtención de una carta de naturaleza fue un requisito fundamental para alcanzar ciertos beneficios y privilegios, estas fueron solicitadas a Rey con frecuencia. La concesión de estas cartas era un regalía del Rey, quien poseía la facultad de crear naturaleza; para los solicitantes y la Corte era una merced otorgada como retribución por algún servicio. Carzolio plantea que, si bien, estas cartas nunca fueron ofrecidas a la venta, en ciertas ocasiones tuvieron un trámite extraño, sobre todo en momentos cuando las necesidades económicas contribuyeron a que aumentase su otorgamiento. Para la Corona, este mecanismo constituyó una fuente de ingreso y una posibilidad de establecer vínculos y relaciones con determinados grupos.
El artículo de Fernanda Mazzanti Pepe, “I caratteri originaldi del federalismo liberali e democratico. Dai Girondini a Cattaneo”, plantea un esclarecimiento del proyecto federal de Carlo Cattaneo (1801-1869), ambiguamente invocada por un reciente gobernante italiano. Como anota, el mismo concepto y la misma palabra pueden ser declinados de modo variable, para adquirir significados diversos y remitir a universos conceptuales, proyectos políticos y elecciones constitucionales muy distintos. Cattaneo se inspiró en el federalismo de Brissot. Para el jurista italiano, el federalismo estaba unido a un concepto de libertad y autonomía locales destinado a contrabalancear el superpoder del centro, promovido por Cavour. Para Cattaneo solo una sociedad civil articulada y pluralista podía ser portadora de la libertad nacida del equilibrio entre los derechos individuales y los de la comunidad, y de la democracia entendida como posibilidad concreta del ejercicio de los derechos civiles y políticos.
Ana Carolina Hosne en “Mundo, hombres y vida política bajo la influencia de Saturno. Una aproximación a la relación entre política y melancolía en la Europa Moderna” nos brinda una visión sobre los vínculos establecidos entre la política y la melancolía desde la perspectiva de los teóricos políticos del siglo XVI. Esta autora plantea como la melancolía, a partir de los aportes de la teoría humoral, fue tomada en consideración por diferentes autores durante ese siglo, pero siempre cargada de negatividad, y los hombres “melancólicos”, considerados una amenaza al buen gobierno. Su trabajo muestra cómo desde la política, muchos problemas fueron tratados y reformulados haciendo uso de la teoría humoral.
Igualmente el trabajo de María Luz González “Prudentes como las culebras y simples como las palomas. Algunas sugerencias para el buen gobierno de una monarquía”, nos propone una reflexión política sobre el siglo XVIII a través de los espejos de príncipe. Tomando como base la fuente “El Arte de Reinar” de Vicente Bacallar y Sanna donde el autor dirige consejos a Luis I para su buen gobierno. Este trabajo busca dar cuenta, por un lado, de la concepción política del autor de “El arte...”, y, por otro lado, su intento de congraciarse con el nuevo monarca.
Tanto la investigación de Hosne como la de González, así como la de Burucúa, “La variedad de lenguas, culturas y multitudes como instrumento paradojal de la unidad humana en los conflictos religiosos del siglo XVI”, están estructurados en torno a algunas obras que sirven de base a sus respectivos trabajos. José Emilio Burucúa toma como eje en su análisis dos obras que ofrecen una visión muy significativa de los fenómenos de inclusión/ exclusión social: la Biblia de Ferrara, publicada en esa ciudad italiana en 1553, pensada como una pieza clave del programa de rehabilitación del judaísmo por parte de los marranos españoles en Italia, y la Peshitta, publicada en París en 1584 por Guy Le Fèvre de la Boderie, una traducción que acerca a los lectores familiarizados con lengua aramea y hebrea, y realizada como parte de un programa de inclusión del pueblo judío. Su propuesta gira en torno a pensar sobre cómo los libros, especialmente a partir de la imprenta, si bien no produjeron revoluciones, influyeron en decisiones políticas, económicas y sociales.
Política, Cultura, Religión… es un libro donde convergen una serie de investigaciones que, con diferentes formas de abordaje, sobre espacios distantes que van desde Europa hasta América, y con una amplitud temporal que se extiende desde la Edad Media hasta la formación de los Estados Nacionales, constituyen una invitación a reflexionar sobre diferentes problemáticas.
Evangelina de los Ríos (UNR)
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